Hippie

Qué fácil es poner negro sobre blanco las cosas negativas: las violaciones, los traumas, el divorcio, las autolesiones. Qué difícil contar las cosas buenas y las soluciones por miedo a parecer un hippie porrero lleno de rastas que solo come tofu.

– James Rhodes. Instrumental.

Compartir el camino con alguien

Hoy prefiero mucho más la idea de compartir un camino con alguien a quien amas, en vez de sentir ese flechazo. Prefiero tener los ojos bien abiertos, sin que me los tape el cinismo o me los cierre el miedo, para buscar y ofrecer atributos que hasta ahora no me habían parecido especialmente importantes: la bondad, la compasión, la profundidad, la paciencia, etcétera.

James Rhodes. Instrumental.

El amor de la actualidad

Por eso, en el amor de la actualidad no hay cortejo, citas, semanas para conoceros mejor, ir de viaje juntos y, con el paso del tiempo, acabar dándoos cuenta de que estáis profundamente enamorados. La cosa tiene que ser como en el cine: vuestras miradas se cruzan (o ves el avatar de Twitter de la otra persona), intercambian un par de palabras, mensajes de texto, correo electrónicos y hala, ya os habéis enamorado. De forma apresurada, inmediata, explosiva, excitante. Se lo cuentas a todos tus amigos en Facebook y te comportas como una puta cabra. Es como una historia de Disney bajo los efectos del crack, y resulta peligroso, joder. Algo así no puede sostenerse.

– James Rhodes. Instrumental.

El abuso y la vergüenza

La vergüenza es el motivo por el no se lo contamos a nadie. Las amenazas funcionan cierto tiempo, y el suicidio es el silencio definitivo. Da igual cuánto tiempo dediques a decirles a gritos a las víctimas, como El indomable Will Hunting, que “no ha sido culpa tuya”. También podrías decirles que el cielo es verde.

– James Rhodes. Instrumental.